El Curso nos dice que antes de despertar debemos transformar el sueño de una pesadilla en un "sueño feliz", de lo cual solemos deducir que esa felicidad del sueño consiste en cambiar nuestras circunstancias de modo que coincidan con nuestras expectativas,
sin embargo a lo que se refiere es a cambiar nuestra experiencia, de modo que esta pueda ser una experiencia de paz independientemente de las circunstancias, ya que no se trata de cambiar el sueño sino de despertar de él.
Hoy exploramos esta idea clave del Curso que lo diferencia de tantos otros caminos espirituales más permisivos y menos certeros.
La reflexión inicial del pensamiento positivo desde mi opinión es precisamente lo que se "vende" ahora en la comunicación de masas...y creo que estp es precisamente creo opuesto al Curso de Milagros, no se trata de ser positivo sino de saber donde estamos, la positividad cuando por ejemplo muere un familiar no ayuda o cuando se tiene mala salud o por ejemplo si uno/a esta gorda esta gorda...ser positivo sería estoy gorda pero que bien! y eso no es asi.....sería entender que significa que muera alguién .....
ResponderEliminarEl pensamiento positivo, en efecto, no es nada si no se acompaña de un "sentimiento" positivo, un sentimiento de paz, es decir, una experiencia, a la cual se accede con un cambio de percepción resultado de comprender el funcionamiento de la mente y de entrenarla,
Eliminaral final se trata de comprender que estar gordo o morir o lo que sea no es significativo porque pertenece al mundo de las ilusiones, lo falso, además de que el que lo valoremos como bueno o malo, es decir, nuestro juicio sobre ello, se debe a nuestras creencias,
se puede vivir no importa qué circunstancias del mundo ilusorio desde una nueva comprensión que elimina el sufrimiento,
En efecto, lo que vende es la expectativa de mejorar nuestras circunstancias tal y como las hemos juzgado y diseñado con nuestra percepción limitada, pero por mucho que las mejoremos serán al final insatisfactorias por su temporalidad, sólo salir del sueño, de lo ilusorio, y despertar a la Realidad puede satisfacernos. Para ello hay que renunciar a todas las ilusiones, lo que suele generar un sentimiento de pérdida mientras aún creemos en ellas, mientras no nos demos cuenta de que no son NADA, y es por esto por lo que el mensaje de ucdm no es popular ni para todos, aunque también es verdad que en este momento hay más gente que nunca preparada para comprenderlo y aceptarlo.